Habla pueblo habla...

"Habla pueblo habla"

¿Te suena este eslogan? Sonó en los albores de nuestra naciente democracia. Democracia que aún consolidada, todavía es imperfecta.
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domingo, 7 de agosto de 2011

Así pasa la gloria del mundo

Publicado en el  País semanal del domingo 7/08/2011
Javier Pérez de Albéniz, en un artículo inserto en el libro "Reacciona", califica a los políticos actuales de: ignorantes, ambiciosos, indolentes, ineptos, mentirosos, inmediatistas y soberbios, que desprecian el pensamiento, la imaginación, la utopía y los valores.
Nosotros no nos atreveríamos a tanto, aunque si es verdad, que a muchos de los que conocemos personal-mente o por sus trayectorias en el mundo de la política, ellos y ellas (ya ejerzan a nivel nacional, autonómico o local) se les podrían aplicar varias de las etiquetas con las que se describen más arriba (sobre todo, y por desgracia, las dos primeras). 
En el tiempo actual, que según dicen, tenemos los profesionales mejor preparados de toda la historia, parece ser estos conciudadanos no se han interesado, en su gran mayoría, por el ejercicio de la acción política, sólo tenemos que mirar a nuestro alrededor. Dicen que los "mercados" ,eufemismo con el que se nombra al poder financiero y a los especuladores, es el responsable de la actual crisis mundial y yo estoy de acuerdo, en lo que difiero es en la opinión publicada por muchos economistas, políticos y expertos en esta materia, que expresa que los poderes públicos no pueden hacer nada. 
Fueron los políticos, con la implantación de políticas neoliberales, los que dieron alas a los especuladores para realizaran sus negocios fraudulentos y ahora todavía tienen suficiente poder para atajarlos, aunque reconozco que no va a ser una tarea sencilla. Esto será posible si los políticos por una vez se dedican a luchar por el bienestar del pueblo y no por los intereses de sus propios partidos cuando no por otros intereses espúreos.
Hoy, los sistemas democráticos occidentales están en peligro y si no ponen remedio estamos abocados a un nuevo fascismo.